Cero.
http://www.youtube.com/watch?v=Ri7-vnrJD3k&ob=av3n (Soundtrack).
Lluvia,
viento y yo solo veías mis pies cerca del agua. Creo que ese día llovió tanto
como nunca había visto en mi vida, y ahí estaba yo sentada a la orilla del
muelle con mi vestido de novia lleno de barro.
El viento
despeinó mi pelo, el agua se llevó mi maquillaje y mi ramo flotaba en el agua.
Mis ojos cerrados mientras la lluvia corría por mi cara y cuello, sentía el
perfume que me había puesto ese día y me daba risa…las nubes grises resaltaban
el color blanco de mi vestido, los bordados y detalles que con tanta dedicación
había elegido yo misma meses antes.
Me paré y
comencé a caminar por el muelle, no caminé muchos pasos hasta que comencé a ver sobre el agua fotos que habían volado
desde la casa. Fotos de besos, de encuentros, de momentos difíciles…
Pensé en
detenerme y tomarlas para luego guardarlas pero, preferí dejarlas ahí para que se fueran con la
corriente. Y así junto con las fotos pasaban pedazos de atardeceres, mañanas y
momentos que vivimos…solo me incliné a mirarlos y me despedí de ellos. Seguí
caminando por el muelle mientras en mis oídos sonaba “I let it fall my heart…and as it fell, you
rose to claim it”… mi vestido volaba con el viento y yo simplemente disfrutaba
de eso.
Seguí caminando y te vi acercarte al muelle, con tu traje
perfecto y una cara de no saber que era lo que estaba sucediendo, gritaste mi
nombre y comenzaste a recoger todas las fotos, los trozos de momentos, de
instantes que para mi ya no existían. Comenzó a llover muy fuerte y el viento
no nos dejaba mantenernos en pie. Yo seguía parada en el muelle y tu seguías
intentando recoger todas las cosas que se habían volado de nuestra casa, me
pedías ayuda y me gritabas tanto…estabas tan enojado porque yo estaba ahí parada,
simplemente mirándote.
Te acercaste corriendo a mi y me pediste explicaciones y seguiste gritándome
y enojándote cada vez mas conmigo. Mientras en mis oídos seguía sonando “set
fire to the rain” veía como en cámara lenta el viento despeinaba tu pelo, tus ojos se llenaban de rabia y me gritaban. Tapé mis oídos lentamente y cerré mis ojos por un
instante para ver si cuando los abriera esto solo sería un mal sueño. Los abrí
y seguías tan enojado...apagué la música y la deje a un lado sin decir una sola
palabra mientras tú seguías gritándome. Solté mi pelo, me saqué los zapatos y
de a poco me saqué el vestido mientras tú me gritabas que estaba loca. Quede
solo con mi ropa interior y todo lo demás lo tiré al lago. Me aproximé al borde
del muelle...no sentía frío, ni miedo… estaba total y completamente en paz. Te miré,
te estiré la mano y te dije “vamos?”…aunque lo dudaste comenzaste a sacarte el
traje, los zapatos hasta quedar igual que yo…te acercaste a mí y estrechaste tu
mano junto a la mía mientras el viento se llevaba nuestras cosas y la lluvia
nos limpiaba, nos miramos y sin pensarlo…saltamos.
Es sorprendente como usando tantas metáforas y sueños personales, logras entregar ideas y pensamientos tan claros.
ResponderEliminarMe declaró fan de tu forma de escribir y de expresarte. Sigo pensando que debes comenzar pronto a trabajar en tu libro!
Y gracias por tu aporte por mi esquina también... Siempre se aprecian comentarios y calidez cuando uno comaprte cosas que, de una u otra manera, son personales y particularmente "marcadoras"
Bastante profundo. En primera lectura logro intuir una invitación a la renovación y a la confianza (recíproca)
ResponderEliminar¿es acaso el símbolo de la mano estrechada el vinculo que cada uno busca en ESA persona?
es exactamente eso...
ResponderEliminar