Lazos...

"no quiero necesitarte porque no puedo tenerte"

Le dijo ella a él, el la miraba con atención y le tomaba las manos aún frías y temblorosas,ella no podía atreverse a dejar su vida, a dejar su estructura y todo lo que tenía por irse con él. Era terrible lo que sentía ella y lo que veía  cada mañana...

Veía una vida estática, una vida llena de negros y grises, una vida que hasta antes de conocerlo pasaba sin penas ni glorias....

Hoy en día era más fácil vivir con el consuelo de que al menos en sueños su vida era diferente, porque la cobardía y falta de valentía de tomar sus maletas e irse eran mucho más grandes que la felicidad misma.

Aun mirándose en aquel café ella le decía que no entendía el miedo gigante que sentía,es un miedo a estar sola le dijo el. En que momento confundí amor con compañía?, dijo ella con un suspiro.

Solos tomados de la mano, jamás había pasado nada más pero la conexión maravillosa que sentían al tocarse la mano era mucho más que cualquier cosa, mucho más que un beso, mucho más que cualquier noche perfecta bajo un cielo estrellado, mucho más que una historia utópica de cuentos y princesas ellos sólo necesitaban eso para saber lo que muchos se demoran años en saber....

Ella tomó otro sorbo de su café con vainilla , el callado como siempre solo la miraba y sonreía...

No quiero perderte, pero como puedo perderte si ni siquiera te tengo? dijo ella. ella sabía que eso no era así que hay muchas formas de tener a alguien y que como seres imperfectos y llenos de errores muchas veces los humanos sólo vemos una sola forma de hacer las cosas  cuando realmente hay millones!. Nuestro espíritu egoísta y poco conformista nos hace traicionarnos .

No puedo creer que mi amor se transformó en un miedo idiota a verme vieja y sin pareja, un miedo idiota a no tener a quien sonreírle cada mañana y a que el amor que tengo es algo imaginario y darme cuenta después que la opción que tomé era la equivocada.

Que es el amor? le dijo ella. El callado solo le beso la mano y ella irrumpió en llanto sin poder siquiera hablar.

Eran las 18:30 y ella ya tenía que irse a cumplir con su labor de mujer, de madre y dueña de casa,él se rascó el dedo donde tenía su anillo de matrimonio como si  este le molestara. Se miraron y sus ojos llenos de nostalgia se volvieron a encontrar como siempre.

Ese momento era de ellos siempre fue de ellos como hace 10 años atrás cuando se conocieron con un tímido HOLA,ese era su momento más íntimo, era el momento donde se unían sin palabras, sin intercambios físicos, sin ruidos sólo silencio y sus ojos ellos entendían mucho más del amor que muchas parejas bien consolidadas.Se pararon de la mesa, se dieron un abrazo y salieron del café.

Afuera llovía y el viento mojaba aún más sus caras, ella lo miró fijamente y le dijo con una leve sonrisa "siempre aquí" y puso su mano sobre su pecho. El la miró y le dijo lo sé linda, tirándole un beso con la mano.

Ella tomo la derecha, el la izquierda y se perdieron en la inmensidad de esa calle tan oscura que los albergaba en ese dulce café, todos los lunes.

Jamás hubo besos, jamás hubo dormidas afuera, jamás hubo caricias ni escapadas a media noche...

Solo existían sus manos, sus cartas, y su café.